¿QUE ES?
Un pie diabético es una complicación que puede surgir en personas con diabetes.
Se caracteriza por daños en los nervios (neuropatía) o en los vasos sanguíneos del pie, lo que puede llevar a infecciones, úlceras o lesiones en los tejidos del pie.
La pérdida de sensibilidad en los pies debido a la neuropatía diabética puede hacer que una persona no sienta las heridas o ampollas que se le pueden formaren el pie, lo que puede resultar en infecciones graves e incluso la necesidad de amputación.
Es crucial que las personas con diabetes cuiden y revisen regularmente sus pies para prevenir estas complicaciones.
¿COMO SE PRODUCE?
El pie diabético se produce debido a dos principales complicaciones de la diabetes: la neuropatía y la mala circulación sanguínea.
Neuropatía diabética: La diabetes puede dañar los nervios, especialmente en las extremidades inferiores. Este daño puede llevar a una pérdida de sensibilidad en los pies, por lo que una persona puede no sentir heridas, ampollas o úlceras.
Problemas circulatorios: La diabetes también puede afectar la circulación sanguínea, lo que retrasa la curación de las heridas y aumenta el riesgo de infecciones.
Como resultado de estos problemas, heridas y úlceras pueden pasar desapercibidas y empeorar sin un tratamiento adecuado. Con el tiempo, estas complicaciones pueden conducir a infecciones graves y, en casos extremos, a la necesidad de amputación.
SIGNOS Y SINTOMAS
- Úlceras o heridas que no cicatrizan en el pie.
- Dolor o sensibilidad en el pie o la pierna.
- Enrojecimiento o hinchazón en la piel del pie.
- Piel seca o agrietada, especialmente alrededor del talón.
- Cambios en el color de la piel, como palidez o manchas oscuras.
- Pérdida de sensibilidad o sensación de hormigueo en el pie.
- Mal olor persistente, que puede indicar una infección.
Es importante estar atento a estos síntomas y consultar a un médico de inmediato si se presentan. Los cuidados y la vigilancia diaria son clave para prevenir complicaciones.
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